CIERRE O RECONSTRUCCIÓN DE HERIDAS 

Se considera como herida a todo tipo de pérdida de continuidad en la piel secundaria a un traumatismo (accidental, intencional e incluso quirúrgico). La gravedad de cada herida depende de su localización, su extensión, su profundidad y su asociación con otros factores como la infección o la presencia de objetos extraños al organismo.

Las heridas nunca deben ser menospreciadas y siempre deben ser siempre valoradas, ya que el manejo inadecuado puede conllevar a serias complicaciones más adelante e incluso requerir intervenciones quirúrgicas más avanzadas. Las heridas requieren de un manejo delicado de los tejidos y el entrenamiento necesario para su cierre primario definitivo con adecuada cicatrización o la realización de procedimientos reconstructivos más avanzados como injertos o colgajos.

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